El santo encuentra mil formas,
aun revolucionarias,
para llegar a tiempo allá donde la necesidad es urgente;
el santo es audaz, ingenioso y moderno;
el santo no espera a que vengan de lo alto las disposiciones y las innovaciones;
el santo supera los obstáculos y, si es necesario,
quema las viejas estructuras superándolas;
pero siempre con el amor de Dios
y en absoluta fidelidad
a la Iglesia a la que servimos humildemente
porque la amamos apasionadamente.
Sean Santos.
Pedro Arrupe sj