1. ME DISPONGO EN SILENCIO A UN ESPACIO DE ENCUENTRO.
a. Respiro profundo, siento, escucho, me relajo
b. Inclino mi corazón y mi ser a la grandeza de la vida
2. PRIMER PUNTO
Trae a tu memoria los momentos felices de esta semana, aquellos en los que te sentiste libre, pleno, alegre, amado, feliz (por sencillos que parezcan, pero que tu interior los disfruta). Esos momentos que aunque cotidianos, te han dejado el corazón con alegría y esperanza. Preséntalos a Dios
3. SEGUNDO PUNTO
¿Qué elementos tienen esos momentos que te hicieron sentir así? ¿Por qué fuiste feliz en esas vivencias? Tal vez te sentiste: amado, aceptado, siendo tú mismo, libre, espontáneo, protegido, compartiendo lo que eras y tenías, recibiendo lo que te ofrecían, etc. Descubre cuál fue la riqueza de esos momentos.
4. TERCER PUNTO
¿Qué elementos que te dieron plenitud en la semana quieres repetir en tu presente y futuro? ¿Qué actitudes, opciones, acciones dejan tu corazón en paz y realizado?
5. AGRADEZCO ESTE MOMENTO DE ENCUENTRO:
Rom 13, 8-10
8 No tengan deudas pendientes con nadie, a no ser la de amarse unos a otros. De hecho, quien ama al prójimo ha cumplido la ley. 9 Porque los mandamientos que dicen: «No cometas adulterio», «No mates», «No robes», «No codicies», y todos los demás mandamientos, se resumen en este precepto: «Ama a tu prójimo como a ti mismo.» 10 El amor no perjudica al prójimo. Así que el amor es el cumplimiento de la ley.